Las vacaciones no sólo son nuestro derecho como trabajadores, incluyendo asuntos legales y sociales, sino que además son nuestro privilegio, y un asunto de suma importancia para nuestro bienestar y, también, para nuestra productividad.Por ello, es también importante que aprendamos a vacacionar. Así de extraño y simple como suena: muchos desconocen la importancia de entregarse por completo al período de descanso anual.
Verdaderas vacaciones sin trabajo
El primer consejo es, claro, no seguir trabajando. Muchas personas, aceleradas en su ritmo de vida, no se desconectan de sus trabajos en los períodos vacacionales. Si eres dueño de tu propia empresa, seguro que querrás estar al tanto de lo que sucede si te has ido de paseo. Pero esto sólo te impedirá descansar y relajar la mente, algo tan necesario para la buena planificación y el buen desempeño en los días laborales. En lugar de revisar tu correo electrónico a diario o de telefonear a la oficina cada día, pide a tu segundo o a tu persona de confianza que te informe en caso de urgentes o de eventos de gran importancia. No necesitas saber los pormenores que ocurran en esos 5, 10, 15 días de descanso. Pide que sólo se te informe lo que es vital que sepas.No te lleves tampoco los pendientes contigo cuando estés de viaje. En lo posible, deja el ordenador en casa. No lleves informes ni carpetas o papeles de trabajo a tus vacaciones. En lugar de ello, elige leer un buen libro o revisar revistas de entretenimientos, de deportes, de coches o de lo que te ayude a relajarte y separarte unos días del trabajo.
Mente relajada y feliz en vacaciones
De igual modo, recuerda que las vacaciones son un privilegio y un derecho. Es bueno estar informado de los acontecimientos a nivel nacional e internacional, claro, pero lo cierto es que en los periódicos solemos encontrarnos con malas nuevas, o con noticias preocupantes. Ten cuidado a la hora de leer el periódico, sigue el rastro a los hechos relevantes, pero no te sumerjas en lo diario. Permite que tu mente juegue a ser parte de un mundo feliz en esos días, para luego volver a la realidad.Las vacaciones, los feriados y los descansos son días para el disfrute y la relajación. Haz tareas de jardinería si te place, duerme todo lo que quieras, dedícate a ver la televisión como un zombie si es lo que te ayuda a descansar. Una buena relajación, a fin de cuentas, es lo que te permitirá ser un mejor trabajador de regreso a la vida diaria.Blog: Oficina y Bienestar