Copaco.
En la actualidad las formas y medios para comunicarse son muchas y variadas, tecnologías que continuamente son mejoradas en una inagotable lucha de compañías telefónicas privadas detrás de usuarios, nuevos o por mantenerlos. Mientras en la corporación estatal Copaco, también crecen como hongos, pero los reclamos, una de ellas y no la única, la falta de línea, o sin línea baja.
Las respuestas dadas en los diversos modos de atención al cliente: “le derivamos al departamento encargado, anotamos su reclamo, le pasamos al servicio técnico encargado, se roban cables, vamos solucionar”, esto en el exitoso caso de ser atendido. Las redes sociales significan una alternativa para las continuas quejas de los usuarios a la falta de atención en algunos números telefónicos que figuran en la factura de pago y en su página web.
Mientras sus ejecutivos no dan precisas directivas para solucionar los problemas o en los call responder a tantos reclamos, entre tantos funcionarios despreocupados de la compañía, están otros agentes que silenciosamente trabajan bajo el crudo sol del medio día, sin detenerles ni lluvia ni otros obstáculos imprevistos.
Construyen casetas, trepan columnas, destapan túneles, unen de nuevo líneas telefónicas que significan cuidadosa y pacientemente unir hilos con hilo, cables con cables, para arreglar y reponer bases y líneas telefónicas. No solo todo eso, además estos técnicos son el blanco de los reclamos que sus autoridades deben gerenciar.